domingo, 8 de marzo de 2009

8 de marzo de xxxx


La verdad que parece mentira che.
Si no me equivoco, estamos transitando el siglo número 21.
Yo, ser humano que ejerzo mi prefesión de hombre desde el año 1987 (1), me indigno cada vez que lo veo y, mordiendo mi labio inferior, con un gesto oscilatorio de cabeza y con una sonrisa producto de la resignación/incredulidad, conteplo estupefacto el transcurso del evento.

No puedo imaginar lo que debe de sentir un integrante del género paridor al observar a ese ser maligno y naranja.
Es la viva imágen de una sociedad machista, occidental, con fuertes influencias de la religión catolica, que piensa que una mujer no es un ser capaz por si mismo.

No se puede negar que es un personaje que contiene cierta rebeldía, ya que aparece en un contexto regional y mundial, que está viviendo varios cambios positivos en el aspecto de las féminas. El caso de Michelle B. y Cristina F., así como varias ministras del ámbito local, son algunos de los ejemplos de ello.

Pero eso no importa.
El personaje (que es un hombre (2), claro está), no sólo nos enseña que una mujer jamás podría resolver un problema sin la ayuda de un varoncito, sino que nos muestra a una damisela deseando desesperadamente que aparezca un caballero para que la socorra.

Pido perdón si con esto estoy cayendo en vanalidades. Sé que hay cosas mucho más relevantes que discutir. Bien podríamos hablar de por qué una mujer no puede dar misa; del ser humano que se le ocurrió el tema del espejito y del arco+flecha de los símbolos de género; del estereotipo de ama de casa mostrado en diversas telenovelas y reclames de fonopréstamos (3); de Humberto de Vargas; y demás temas preocupantes como la violencia doméstica, cuya excelente campaña se puede observar, por ejemplo, al concurrir a una costosa sala de cine.
De verdad no es la intención ser vanal.
Es algo que realmente me pasa y he compartido con otros seres humanos.

No sé ustedes, pero cada vez que miro a Mr. Músculo, pienso: La pucha, es bravo ser mujer

Desde aqui, mis más sinceros saludos, en un día que nos recuerda todo lo que falta por hacer, y que no se hace sólo con seres cuyo aparato de reproducción es interno. Se hace entre tod@s.





(1) En realidad ese es el año de mi nacimiento, la elección de mi sexualidad supongo que habrá sido en años posteriores, pero se utiliza la fecha para tener una referencia. Si algún aficionado a la psicología lo sabe, que me lo diga.
(2) Si bien su aspecto es de un hombre, su vestimenta ceñida hace dudar de su preferencia hacia las mujeres en al ámbito sexual
(3) Se le debería quitar el título de mujer al individuo que realiza el papel de ama de casa en el aviso de fonopréstamos. Es particularmente detestable



.